La cirugía vaginal como vía natural para acceder a la pelvis, es el abordaje por excelencia en cirugía ginecológica sin cicatrices.
Además, existe la posibilidad de sustituir la anestesia general por por anestesia raquídea y dedicarte a escuchar música o a hablar con tu ginecólogo durante el transcurso de la intervención si lo prefieres.